Probablemente la noticia que muchos estaban esperando, Spotify finalmente llega a Estados Unidos. Hasta el momento el startup estaba enfocado en Europa (específicamente siete países del continente: España, Reino Unido, Finlandia, Francia, Países Bajos, Noruega y Suecia).
El anuncio es escueto y el servicio aún no está disponible, simplemente se oficializa la llegada, empiezan las invitaciones y el juego habitual de servicios nuevos que se hacen disponibles en internet y necesitan un poco de buzz y ruido para crear tracción y atraer un gran número de suscriptores a la plataforma.
¿Por qué la llegada de Spotify a Estados Unidos es importante en Latinoamérica, sobre todo considerando que el servicio ya llegó a España? Porque el país suele ser la puerta de entrada a todo el continente americano. Una vez terminadas las negociaciones con las cuatro grandes discográficas es (en teoría) más fácil negociar con las filiales en el resto de países.
Spotify ahora tiene el reto de ser exitoso, le toca compatir con algunos grandes, incluyendo Apple con su iTunes Store, Amazon con su MP3 Store y otros servicios populares más parecidos como Pandora que también es por medio de stream (pero gratuito).
El reto más grande de Spotify es, definitivamente, Latinoamérica. De llegar a la región tendrán no solo que hacer acuerdos con las discográficas, también tendrán que ver formas de que las operadoras los soporten sin que genere un costo muy alto para el cliente por transferencia de datos (de usarlo en sus teléfonos móviles) y la búsqueda de integraciones para realizar cobros unificados.
Spotify, para mi, es el futuro de la música. Y de los servicios que más gusto me da pagar. El tener un catálogo de millones y millones de canciones siempre disponibles en mi computadora, en mi smartphone e inclusive en dispositivos como Sonos, es simplemente maravilloso. Creo que lo tienen más claro aún que Apple aún cuando ellos tienen toda la experiencia.