Es cierto que los más fanáticos de Apple
deben estar hasta el gorro de tanto rumor viviente. Y es que de un
tiempo a esta parte, las noticias no paran de producirse.
El lanzamiento del iPhone 5
parece estar a la vuelta de la esquina, de manera que tampoco es
extraño que todo el mundo hable, opine y hasta especule sobre la ficha técnica de un dispositivo que pretende romper moldes en el mercado
de la telefonía móvil inteligente. Lo mismo ocurre con la fecha de
lanzamiento. Ha cambiado tantas veces que nadie está seguro de nada. Ha
sido esta semana cuando se ha apuntado a una presentación para el próximo 4 de octubre, un miércoles en el que Tim Cook podría aparecer sobre los escenarios para estrenarse como líder de la de Cupertino. El caso es que ahora suena una mala noticia para los amantes de la tecnología Apple.
El iPhone 5 podría retrasarse. Y no por un capricho de la propia Apple. Nada más lejos de la realidad. El medio DigiTimes acaba de publicar que esta nueva demora podría haber sido producida por culpa de un problema en la fabricación de la pantalla del terminal. De hecho, según se ha indicado, la compañía Wintek (responsable de la fabricación del mismo) habría cometido algún error a la hora de montar la pantalla sobre la carcasa,
de manera que se produce un extraño efecto burbuja sobre la superficie
del dispositivo.
Algo parecido a lo que ya ocurrió con el HTC 7 Trophy, un dispositivo equipado con Windows Phone 7 que llegó a algunos clientes con el mismo defecto de fabricación. De esta manera, el lanzamiento del iPhone 5 podría retrasarse más de lo esperado.
El problema es que por culpa de esta burbuja de aire, que se produce al no cuajar al vacío con la superficie del terminal, los contenidos de la pantalla no se verían con nitidez.
Es así como las primeras unidades del iPhone 5 no estarían llegando a las tiendas para estar listas entre el próximo 15 y 21 de octubre, justo cuando estaría previsto que se iniciaran las ventas del terminal.
No obstante, está claro que ninguna de las empresas implicadas en este asunto tiene la menor intención de hacer declaraciones. Mucho menos lo hará Apple, compañía que permanece en silencio desde el principio de los tiempos. Mejor dicho, de los rumores. Es su modus operandi.
En cualquier caso, nos encontramos ante un problema interno de Apple. La compañía tendrá que resolverlo de puertas para adentro. La ventaja es que la compañía Wintec solo se responsabiliza de la fabricación del 25% de las pantallas de los nuevos iPhone 5. Estaremos atentos por si se produce alguna noticia al respecto.