Al final, ya sea por gusto o por necesidad, acabamos renovando el móvil, y el viejo termina en manos ajenas, bien porque lo hemos vendido, lo hemos regalado o lo hemos reciclado. El caso es que más de la mitad de los móviles de segunda mano acaban circulando por ahí con datos personales de su antiguo propietario, según reciente estudio de la compañía CPP. Es un grave riesgo de seguridad, porque esa información sirve para cometer fraudes con tarjetas de crédito y para cometer robos de identidad.
La compañía CPP ha realizado un experimento entre más de doscientos teléfonos móviles y tarjetas SIM adquiridos a través eBay y otras tiendas en línea. El problema es que casi todos los antiguos dueños de esos móviles creían haber borrado sus móviles antes de entregarlos, y el 60 por ciento estaba absolutamente convencido de haber eliminado todos los datos sensibles. Sin embargo, el 54 por ciento de los teléfonos móviles de segunda mano analizados todavía contenían mucha información sobre sus antiguos propietarios.
Y es que eliminar los datos manualmente no basta, porque, con las herramientas adecuadas, pueden recuperarse. Los expertos en seguridad de CPP recomiendan que lo primero es restaurar la configuración de fábrica a través del menú del móvil. En segundo lugar, debes sacar la tarjeta SIM y destruirla. Después hay que borrar todas las copias de seguridad que tengas del smartphone en otros dispositivos como ordenadores.
Antes de salir de cualquier aplicación, de una red social, del servicio de correo web o de una red wi-fi, asegúrate de haberte desconectado, y luego borra la contraseña y la conexión del smartphone. Finalmente, evitar utilizar la misma contraseña para varios servicios, y nunca almacenes contraseñas en tu móvil. Si tienes mala memoria, puedes usar una fotografía como recordatorio.